*MIEDO A LA MUERTE:

Una madrugada de febrero desperté de un salto y un escalofrió recorriendo mi espalda.

Podía sentirlo, la muerte cada vez estaba mas cerca.

Corrí a la habitación de mis padres y me tire sobre a cama llorando, me aferre ala cintura de mi padre y desahogue mi pena. Mi madre se despertó asustada por mi reacción.

Me preguntaban insistentes el motivo de mi llanto incontenible, yo no podía i hablar y mucho menos quería decirles sobre mi más grande temor.

Como iba a explicarles que esos temblores en mi cuerpo, mis lagrimas imparables, mi cambo de temperatura y mi miedo se debían a una idea.

Una simple idea que surgió mientras dormía.

Que pasara cuando yo me muera?

Que sentiré? Como moriré? Porque se tiene que acabar la vida?

Yo no quiero un día cerrar los ojos y ya no despertar.

YO NO ME QUIERO MORIR.

Me presentare y continuare.

Soy Shannon y tengo 19 años, siempre he sido cambiante, cuando era niña me gustaba mucho jugar con mis hermanas, estar con mis amigos y gozar de la vida. No tenía preocupaciones ni nada que me impidiera ser feliz.

Hasta que un día comencé a odiar al destino.

Con la perdida de un ser querido al cual apreciaba demasiado empecé a odiar a la muerte.

Porque se tenía que llevar a la gente a la que uno ama?

Ese día se desataría en mí una subconsciencia infundada en el terror.

El miedo a la muerte.

Con el paso de los años la muerte seguía haciendo de las suyas, llevándose a gente a la que amaba, quitándome a las personas que me hacían feliz, y llevándose con ella momentos que nunca recuperare.

Trate de entender que es parte del ciclo de la vida, uno nace, crece, se desarrolla y muere.

Porque tiene que ser así?

Me pregunte si existiría alguna formula para evitar la muerte,.

Cuando llegue a tener madurez a los casi 19 años la muerte volvía a rondar cerca de mi.

Esta vez se llevo a mi querida mascota, una french poodle, de color negro. La vida me la había mandado cuando perdí a mi tío, por muchos años fue mi mejor amiga, mi compañera y mi familia.

Cuando solía estar triste ella estaba conmigo, cuando estaba sola ella permanecía a mi lado, siempre dándome su calor y llenando mi vida de alegría.

Ella formo parte de la familia, siempre querida y amada por todos, era especial y yo la amaba mucho.

Un día de enero esa felicidad se vería truncada por el andar de la oscuridad.

Se la llevo, una vez mas la muerte aparecía en mi camino.

Que no le bastaba con quitarme a mis seres queridos?, ahora también a mi mascota!!!

Ese día seria el caos total, mi mente se dejo llevar por el dolor, y mi subconsciencia despertaría para ya nunca dejarme en paz.

El miedo me recorrió de la punta de los pies a la cabeza. Se enterró en mis entrañas y no había manera de sacarlo de ahí.

Esa noche después de la cremación de mi mascota, trate de descansar y así asimilar el suceso de su perdida.

Siempre que la muerte se lleva a alguien me preguntaba lo mismo.

Porque esa persona?

Ya nunca lo volvería a ver, ni a oírla, ni a sentirla, nunca volveríamos a estar juntos, y todo lo que un día vivimos se quedara solo en mi memoria, cuando comience a olvidar que va a evitar que también olvide a mis seres queridos.

Mientras descansaba, soñé con mi mascota, tan clara, como si no se hubiera marchado, podía sentirla cerca de mí, y le rogaba que no me dejara, que era parte importante de mi vida.

Quería correr y alcanzarla para hacerla regresar y entonces la obscuridad cubrió mi sueño, todos los colores murieron y gobernó el terror, mi sueño moría y en cambio una pesadilla se forjaba.

Era incapaz de salir de ella, me veía ahí, de pie junto a una familia, todos lloraban la perdida de un ser querido.

Yo quise acercarme pero algo me decía por dentro que no lo hiciera. Pero ahí estaba yo tratando de ser fuerte.

Al acercarme a la familia pude ver varios rostros conocidos, familiares que ya habían partido al otro mundo, como demonios era eso posible.

Cuando alcanzaba la orilla del agujero vi un ataúd, era color plata y sombrío. Quise preguntar quien era la persona que se encontraba dentro.

Cuando entonces tuve la sensación de que era YO.

Si, era yo la que estaba dentro, gritaba y nadie parecía escucharme, lo sabia, estaba muerta.

Sentí como la tierra caía sobre mi ataúd y yo trataba de abrirlo, con la fuerza que aun sentía en mi cuerpo trate de empujar la tapa, pero no cedía ni un milímetro.

Y yo afuera observando, dejaba que me enterraran aun sabiendo que estaba viva y estaba luchando por salir.

Esa noche desperté, mi cuerpo no se movía, yo quería correr y decirles a todos estoy viva, no me entierren, pero grite.

Mis padres llegaron a mi habitación entre sombras, entonces mi mente se cerró, yo no podía decirles lo que soñé, no, aun no.

Les dije que soñé con mi perrita, y ellos aseguraron que era por el dolor que llevaba dentro, que descansara, que nada malo me sucedería.

Una vez mas las palabras clásicas “Dios sabe por que se la llevo, ahora es un ángel que cuidara de ti”

Pero yo no necesitaba ángeles, yo quería a mi familia completa y feliz.

Esa noche yo misma comencé a escarbar en mis miedos, algo que no debí de haber hecho, pero no sabía que eso desencadenaría mi fobia.

Porque es lo que tengo, una fobia.

Mejor conocida como TANATOFOBIA. Se define como un persistente, anormal e injustificado miedo a la muerte o a morir.

Y con el paso de los días, mi miedo era mayor.

Pensaba en que la muerte es algo muy extraño pero aun así no dejaba de darme miedo.

Digo, que hay mas allá de morir, que pasa con la conciencia, que se siente, yo no quiero un día cerrar los ojos y ya no abrirlos, o que me atropellen y tenga que sufrir, que me maten, yo no quiero simplemente dejar de existir.

Así fui planteándome las mil y un maneras en las que no me gustaría morir, y deseando que nunca tuviera que pasar.

Mi principal miedo es ese, no saber que va a ser de mi, yo no quiero dejar de respirar, amo demasiado mi vida para dejarla, con el paso del tiempo se que la muerte se acerca aun mas y mas a mi y el sentirla cerca me da pánico.

A veces he llegado a pensar como será al punto de llorar de la angustia, del miedo.

Para que mentir, mi fobia es mayor con el transcurso de los años.

Cuando siento que se acerca cada vez mas y mas a mi o a mi familia.

No se si algún día podre aceptar que mi vida debe de tener un final, del cual aun no soy consiente.

Desearía tener la vida eterna para no tener que cerrar mi libro, poder escribir sobre las hojas de mi vida tanto como me sea posible.

Aun el miedo vive dentro de mí y crecerá hasta que yo se lo permita, pero me niego a aceptar que mi vida tenga un final.

No se si un día simplemente no despertare, pero se que no quiero que llegue ese día.



BY: Lena